Ahhhh, meterte en la cama al final del día recién bañada con sábanas limpias… y empezar a dar vueltas mientras te sube la ansiedad a la cabeza y no te deja dormir. Te ponés a hacer doomscrolling, ves sin pensar una foto o una cuenta o un estado o un flashback de un momento cringe que todavía no podés superar y ya está: tu felicidad de estar recién metida en la cama después de un día largo está arruinada.
Es frustrante, lo sabemos. Todos estuvimos en esa alguna vez (tal vez incluso más seguido de lo que nos gustaría admitir). La buena noticia es que, si te lo proponés, con algunas herramientas relajantes vas a poder volver a tu estado feliz de calma mental. Acá te compartimos cinco formar para sentirte bien antes de quedarte dormida:
1. Frases que te hagan bien
Ya sea una nota en tu teléfono, en un draft de gmail o un post guardado en Instagram, tené a mano una pequeña colección de frases que sean significativas para vos. Puede ser algo tan simple como “esto también pasará” o “si tiene que ser, será”. Pueden ser frases que te ayuden a levantar el ánimo durante la noche si justo viste una foto de tu ex en IG o que te hagan sentir acompañada si estás lejos de tu familia y te sentís sola. Según la situación lo amerite, leerás en el momento justo te ayudará a irte a dormir con una sensación de bienestar que tu mente y tu piel agradecerá la mañana siguiente.
2. Hacete una buena playlist
En lugar de mirar televisión antes de quedarte dormida, escuchá canciones que te relajen o audios de meditación relajantes. Hay aplicaciones muy buenas que podés chequear, como Calm. También encontrás miles de videos en YouTube.
3. Visualizá tus sueños
La mente es increíblemente poderosa: muchas veces nos ponemos a pensar demasiado y nos enroscamos pensando en situaciones que ni siquiera han sucedido. De ahí nos sube una ansiedad que innecesaria como es nos puede mantener despiertos toda la noche. Si sentís que estás a punto de caer en uno de estos espirales de angustia, calmá tu mente a través de la visualización. Es decir: soñá despierto con ese lugar en donde te sentís feliz. Puede ser cualquier cosa, desde el recuerdo de unas vacaciones increíbles hasta una imagen de cómo te gustaría que fuera tu futuro en seis meses o cinco años; también podés imaginarte que estás en una playa, evocar la sensación del sol en la cara, el ruido de las olas, visualizar la espuma bordeando la arena. A través de imágenes mentales, va a lograr relajarte y distraer tu mente, alejándola de lo que sea que te dé ansiedad.
4. Escribí un diario para agradecer
Llevar un diario en donde anotás todas las cosas por las cuales te sentís agradecida puede ser un gran recurso. Tenelo siempre cerca en la mesa de luz y leelo cinco minutos antes de irte a dormir. Es una manera fácil de mejorar tu estado de ánimo y pensar positivamente antes de quedarte dormida.
5. Planificá tu mañana
Para lograr un día productivo, todos estamos a favor de empezar la mañana con un tiempo reservado para vos. Si estás pasando una noche realmente difícil y necesitás algo que te saque de la ansiedad de estar perdiendo horas de sueño, planificá una actividad que te guste para hacer a la primera hora de la mañana. Poné la alarma 30 minutos antes y salí a caminar. O llamá por WhatsApp a un amigo o a un familiar mientras paseás por el barrio. También podés inscribirte en una clase de gimnasia a la que no vas hace tiempo. No solo vas a empezar el día con un poco de ejercicio, sino que también vas a sentirte bien haciendo algo especial para vos.
